Patatas al horno con tomate frito y philadelphia

Muchas veces he leído y escuchado que todo lo que va al horno sabe bien, y si lo pienso, al menos en mi caso, es completamente cierto. No recuerdo ninguna comida que después de pasar por el horno me haya defraudado y jamás hago ascos a un buen asado.

Últimamente estoy un poco aburrida de hacer patatas cocidas, y es que en casa somos muy "patateros", pero ya sabéis, de las fritas no se debe abusar, así que hoy os traigo una receta de patatas horneadas, muy ricas y fáciles de preparar. 

INGREDIENTES:

(seis raciones)

10 patatas medianas

1 1/2 cebolla

1 cucharada rasa de orégano

250 ml. de tomate frito

300 ml. de agua

3 lonchas de jamón serrano

3 cucharadas de aceite de oliva 

sal al gusto

150 gr. de queso tipo philadelphia

ELABORACIÓN:

1. Pelar, lavar y cortar las patatas en rodajas no demasiado gruesas.

2. Colocamos las patatas en la placa del horno repartiéndolas uniformemente.

3. En un recipiente echamos el agua, el tomate, el aceite, el orégano, la cebolla muy picada, el jamón picado y la sal. Mezclamos bien.

4. Vertemos la mezcla anterior sobre las patatas y, a continuación, con la ayuda de una cuchara distribuimos pequeñas porciones de queso por toda la bandeja.

5. Horneamos a 200 grados durante 45 minutos o hasta que comprobemos que las patatas están bien hechas. Durante el horneado hay que tener cuidado de que no se nos queme el queso, ya que este tipo aunque es cremoso  no suele fundirse bien con la salsa. Si fuese necesario ponemos unas cucharadas de salsa sobre el queso y lo chafamos un poco con un tenedor para quede bien integrado.

¡Buen provecho!!!

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